En la industria alimentaria la temperatura de los ingredientes juega un papel fundamental en la calidad del producto final. Un aspecto clave en este sentido es la temperatura de la harina, que influye directamente en las propiedades de la masa y, por tanto, en la consistencia, sabor y textura de los productos horneados.
Sin un adecuado control térmico, las variaciones pueden afectar la homogeneidad del proceso, incrementando el riesgo de inconsistencias en la producción. Porque la variabilidad térmica puede derivar en problemas como:
- Cambios en la viscosidad y elasticidad de la masa.
- Irregularidades en el rendimiento de la fermentación.
- Productos con características inconsistentes entre lotes.
- Mayores dificultades en la gestión del tiempo de producción y desperdicios de materia prima…
En Gashor ponemos freno a esta amenaza con nuestro sistema de enfriamiento de harina.
La solución: sistema de enfriamiento de harina de Gashor
En Gashor ofrecemos un sistema de enfriamiento de harina diseñado específicamente para la industria alimentaria.
Este sistema permite enfriar la harina a una temperatura constante y precisa, mejorando la calidad del proceso y del producto final.
Nuestro sistema funciona mediante un intercambiador de calor de glicol que genera aire frío. Este aire circula continuamente por un depósito intermedio, localizado entre los silos de almacenamiento y el punto de consumo.
Un ventilador de alta presión y un lecho fluidificado garantizan que la harina se mezcle homogéneamente con el aire frío, logrando una temperatura estable y uniforme en todo momento.
Así lo hacemos
Hemos perfeccionado este proceso gracias a nuestro conocimiento profundo de las fases claves de la gestión de ingredientes industriales: el almacenamiento, el transporte neumático y la dosificación.
El sistema de enfriamiento de harina de Gashor se desarrolla de la siguiente manera:
- Captación de harina: La harina se traslada desde los silos a un depósito intermedio, donde comenzará el proceso de enfriamiento.
- Enfriamiento con aire frío: Un intercambiador de calor de glicol genera aire frío que se introduce en el depósito a través de un ventilador de alta presión.
- Mezcla homogénea: El aire frío circula por el lecho fluidificado, asegurando que cada partícula de harina alcance la temperatura deseada de manera uniforme.
- Control de temperatura: Una sonda monitoriza y regula la temperatura, garantizando que la harina salga del sistema con la temperatura exacta requerida por la producción.
Ventajas del sistema de enfriamiento de harina de Gashor
Comparado con otros sistemas que generan reducciones de temperatura abruptas e inestables, nuestro sistema ofrece beneficios muy importantes para lograr la máxima calidad del producto final:
- Disminución progresiva y controlada de la temperatura, evitando choques térmicos que puedan afectar la harina.
- Distribución homogénea del frío, gracias a la acción directa sobre cada partícula de harina.
- Eficiencia energética optimizada, con un depósito aislado y encamisado para evitar pérdidas de temperatura y condensación.
- Producción más controlada y calidad constante, permitiendo a las empresas mantener la uniformidad en sus productos.
- Supervisión precisa de temperatura, con una sonda que regula el intercambiador de calor según los requerimientos de cada instalación.
- Rendimiento y adaptabilidad personalizada a cada necesidad: Nuestros sistemas pueden enfriar la harina hasta 15°C por debajo de su temperatura inicial, con un rendimiento de hasta 2400 kg/h.
Es decir, podemos diseñar tu propio sistema enfriador de harina según las necesidades de refrigeración y los índices de consumo específicos de cada instalación.
Y todo, además, asegurando una integración eficiente y cómoda en tus procesos de producción.
Los peligros de no controlar la temperatura de la harina
Una experiencia de más de 60 años en gestión de ingredientes industriales nos ha enseñado en Gashor que prescindir de un sistema de enfriamiento de harina adecuado puede acarrear graves consecuencias para la producción industrial de alimentos.
Algunos de los más importantes son:
- Fallos en la fermentación: temperaturas inadecuadas afectan a la estructura del pan y otros productos horneados.
- Disminución de la vida útil del producto: al mismo tiempo, una falta de control térmico puede hacer proliferar microorganismos.
- Variabilidad en la textura de las masas: este problema dificulta la manipulación de la materia prima, lo que obviamente descontrola la calidad final…
Por eso el enfriamiento de harina es una necesidad clave para diversas empresas de la industria alimentaria:
- Panaderías industriales, que necesitan masas con una textura homogénea y una fermentación controlada.
- Fabricantes de galletas y productos de repostería, donde la consistencia de la masa impacta directamente en la calidad final.
- Empresas que fabrican pastas, donde una harina a temperatura estable mejora el proceso de producción y reduce variaciones de calidad.
No controlar estos problemas puede repercutir directamente en la rentabilidad y en la reputación de la empresa y de la marca.
Gashor: aprovecha nuestra experiencia y compromiso con la industria alimentaria
Como expertos en gestión de ingredientes industriales, en Gashor ofrecemos soluciones llave en mano para almacenamiento, transporte neumático y microdosificación.
Nuestro conocimiento de los puntos clave del sector nos permite diseñar sistemas que optimizan la producción, reducen desperdicios y mejoran la calidad de los productos.
Si buscas una solución eficiente para el control de temperatura en tu proceso de producción, nuestro sistema de enfriamiento de harina es la respuesta. Contáctanos y descubre cómo podemos ayudarte a optimizar tu operación.
